“MANCHESTER FRENTE AL MAR”

La culpa es una de los elementos más complicados para poder avanzar en las relaciones humanas, luego de hechos traumáticos que han afectado a una familia. Esta es la primera conclusión que se saca luego de ver “Manchester frente al Mar” (2016), cinta dirigida y escrita por el cineasta estadounidense Kenneth Lonergan; la cual evidentemente se podría definir como un filme dramático; cuya eficacia reside en un buen guion y en actuaciones sobresalientes. La película se sustenta en el conflicto interno del protagonista, Lee Chandler (Casey Affleck); quien se siente culpable por la muerte de sus dos hijas pequeñas, que fallecieron en un incendio en su casa, mientras él había salido a comprar más alcohol, luego de estar con sus amigos. Lonergan, de 62 años, ha dirigido además dos largometrajes: “Puedes Contar Conmigo” (2000) y “Margaret” (2011), películas también de corte dramático; lo cual se explica y sustenta debido a su experiencia anterior como exitoso dramaturgo en Broadway y Londres. En “Manchester frente al Mar”, la estructura narrativa está muy bien construida, ya que el conflicto y los pormenores de la historia se van entretejiendo lentamente. En un comienzo, el espectador ve a Lee trabajando como conserje de pequeños edificios en Boston, muy lejos de la residencia familiar, ubicada en Manchester, estado de New Hampshire. Arregla cañerías, destapa baños, palea nieve; trabajos duros que realiza como si estuviera expiando sucesos de una vida anterior. Mediante pequeños raccontos nos enteramos de su pasado: situaciones con su hermano Joe (Kyle Chandler) y su sobrino Patrick (Lucas Hedges); y con su ex esposa Randi (Michelle Williams). El gran quiebre se produce cuando recibe la llamada que le comunica la muerte de su hermano y que ha quedado como fideicomisario y tutor de su sobrino Patrick, que tiene dieciséis años, y se encuentra en plena adolescencia (incluso tiene dos novias); todo lo cual lo obligará a volver a Manchester y enfrentar el terrible pasado, que no ha podido superar. En este reencuentro con su amado sobrino, Lee realizará un dificultoso camino de redención y de auto perdón, que les permitirá a ambos seguir caminando en la existencia.