“SNIPER: EL FIN DEL ASESINO”

No todo lo que brilla en Netflix es oro. Definitivamente hay cintas que no cumplen ni siquiera con las reglas más básicas de la entretención; es decir una película bien construida, con personajes consistentes y una historia creíble y bien estructurada. “Sniper: El fin del Asesino” (2020), cinta dirigida por la cineasta canadiense Kaare Andrews, promete ser una buena película de acción, pero la verdad es que los personajes no tienen densidad y la historia es trivial y tampoco adquiere importancia conforme pasan los minutos. El filme se estructura en torno al asesinato de un Presidente de un país sudamericano que está por firmar un convenio económico con Estados Unidos, que significará un tremendo salto en el desarrollo de dicha nación, pero que evidentemente no a todos conviene. La francotiradora mortal es Lady Muerte (Soyaka Akimoto), que no se sabe quién la financia; pero todo está armado para involucrar al ex agente Brandon Beckett (Chad Michael Collins); el que luego de ser detenido y sobrevivir a un ataque de un comando de mercenarios rusos, para que no hable; pide ayuda a su padre, Thomas (Tom Berenger), otro ex agente; los que destinarán todos sus esfuerzos para aclarar la situación y liberar de culpas a Brandon. En este empeño tendrán la ayuda del agente Zero (Ryan Robbins) y de la agente Clover (Emily Tennant); y la resistencia del jefe Franklin (Lochlyn Munro); para enfrentarse al mercenario Drake Phoenix (Michael Jonsson), quien fue contratado por el empresario farmacéutico Donald South (Vincent Gale), a quien no le sirve el convenio con Estados Unidos. Como se ve, desde el punto de vista del guion y de los personajes, la cinta carece de solidez e importancia, sin lograr que agarre vuelo con el correr de los minutos y de las escenas. Andrews, de 48 años, había dirigido anteriormente dos largometrajes: “Altitude” (2010) y “Cabin Fever: Patient Zero” (2014), desconocidos en Chile y que por lo tanto no pueden aportar a favor ni en contra del análisis de esta cinta y de la filmografía de la realizadora. Como conclusión, se puede decir que “Sniper: El Fin del Asesino” no logra ninguno de los objetivos que puede haberse planteado: no entretiene, no es buen cine y a duras penas mantiene al espectador despierto.