lunes, 24 de septiembre de 2018

“EL DEPREDADOR”

Continuando con la sobre explotación de personajes, ideas y argumentos exitosos económicamente que realiza Hollywood, llega a las salas comerciales “El Depredador” (2018), dirigida y escrita por el cineasta estadounidense Shane Black y que vendría siendo la cuarta entrega de una serie que se inició en 1987 con “Depredador”, sobre un alienígena cazador de humanos, cinta que protagonizó el ya mítico Arnold Schwarzenegger.

Como se puede ver ni siquiera tienen mucha creatividad para los nombres de las secuelas. La segunda se llamó “Depredador 2” (1990), la tercera “Depredadores” (2010) y la última, “El Depredador”, sin que realmente se produzca un avance de calidad en el resultado, que justifique la insistencia en el tema, quedando abierto el final de ésta última, como anunciando que vendrá una quinta película.

Black, de 56 años, había dirigido anteriormente tres largometrajes: “Kiss Kiss Bang Bang” (2005), “Iron Man 3” (2013) y “Dos Tipos Peligrosos” (2016), demostrando que tiene más talento para las comedias que para las películas de acción. De hecho, “El Depredador” por momentos parece una comedia, por los abundantes chistes que realizan los soldados miembros del comando que luchan contra el alienígena; lo que resulta extraño, dada la cantidad de muertos que va dejando por el camino el extraterrestre.

Además, hay varios elementos del guion que resultan difíciles de aceptar, como que llega a la Tierra una nave escapando de un punto distante de la galaxia y resulta que es un alienígena desertor, que quiere entregar una súper arma a los humanos para defenderse de los depredadores espaciales.

Los restos de esta nave son descubiertos por un capitán de Ejército, Quinn Mackenna (Boyd Holbrook), que casualmente se encontraba allí, en algo así como la selva mexicana, en un operativo. Tampoco se entiende mucho por qué lo detienen después de esto y menos cómo lo suben a un bus lleno de otros soldados considerados “locos” y que por supuesto se transformarán en su nuevo equipo en la lucha contra el Depredador, comportándose todos ellos como héroes mártires, muy a lo estadounidense. A esto hay que sumar que el Depredador quiere raptar al hijo de Quinn, Rory (Jacob Tremblay), un genio; y que al comando se suma la doctora y astrónoma Casey Bracket (Olivia Munn), no sólo experta en extraterrestres, sino también en lucha y uso de armas. La verdad, difícil de creer.

No hay comentarios: