Una mirada periférica aporta
muchas veces nuevas luces sobre los personajes de la historia que se han
convertido en leyendas y se completa un retrato más humano de estos iconos de
la cultura universal.
Ahora que se cumplieron 50 años de la muerte de la actriz
estadounidense Marilyn Monroe, la cinta “Mi Semana con Marilyn” (2011),
dirigida y producida por el cineasta británico Simon Curtis, cumple con esta
aseveración a cabalidad, ya que está basada en el libro que escribió Colin Clark,
documentalista y escritor, que en sus comienzos trabajó como tercer asistente
de dirección del filme “El Príncipe y la Showgirl” (1957), que dirigió y actuó
Laurence Olivier en Inglaterra y en el cual Monroe fue la co-protagonista.
Clark (Eddie Redmayne), como casi
todos, se enamoró perdidamente de la Monroe (una brillante Michelle Williams) y
por su bonhomía se ganó rápidamente la confianza de la actriz, cumpliendo un
rol fundamental para que ésta llegase a
las filmaciones y no se sumiera en sus habituales depresiones, producto de la
falta de confianza en sí misma, a pesar del apoyo constante de su asesora Paula
Strasberg (Zoe Wanamaker); lo que le ganó el favor de Olivier (Kenneth
Branagh).
El espectador ve a la Monroe a
través del recuerdo de Clark, que destaca su talento innato para la actuación,
que ella siempre trató de reforzar mediante el Método de Stanislavski; pero
sobre todo su encanto natural y su fragilidad, producto de su infancia carente
del afecto de sus padres; lo que la hacía consumir sedantes y barbitúricos y
defenderse detrás del personaje público y adorado que era Marilyn.
Clark tuvo la posibilidad única y
privilegiada de gozar de la intimidad y confianza de Marilyn, con la mayor
intensidad posible, ya que sabía que sería un privilegio transitorio, un
paréntesis maravilloso dentro de lo fantástico que ya resultaba para él
trabajar en cine, su máximo sueño. De este modo, la cinta es muy considerada no
sólo con la Monroe, sino también con Vivian Leigh (Julian Ormond), la esposa de
Olivier; con la actriz Sybil Thorndike (Judi Dench) y con el último esposo de
Marilyn, el dramaturgo Arthur Miller (Dougray Scott), que no fue capaz de ser
el compañero que necesitaba la misteriosa e inatrapable Marilyn Monroe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario